Aunque no nos guste admitirlo, mucha gente sigue pensando que los juegos preliminares son el proceso previo al "acontecimiento principal" de la penetración y el orgasmo masculino. Los preliminares se consideran prescindibles, un lujo que se puede disfrutar un domingo por la tarde, pero que a menudo se omite durante un rapidito entre semana.
Esta actitud hacia los juegos preliminares no sólo es anticuada, sino que también es excesivamente heteronormativa. No hay nada malo en un rapidito, pero creo que ya es hora de que reconozcamos la importancia de los preliminares y dejemos de considerarlos "inferiores" al sexo con penetración.
Como gran creyente en la importancia de los juegos preliminares, aquí están mis 6 razones por las que todos deberíamos centrarnos menos en la gran O y más en la gran F.
1. Es increíble
Estoy diciendo lo obvio, ¡pero es verdad! Los preliminares pueden incluir lo mejor del sexo: besos, caricias, sexo oral… todo lo que te hace sentir un cosquilleo.
Según un estudio, sólo el 25% de las personas con vagina llegan al orgasmo con la penetración, por lo que los juegos preliminares son el momento en el que la mayoría de nosotras podemos sentirnos más excitadas.
Apresurarse en los juegos preliminares significa que es probable que te pierdas el placer y los orgasmos, por lo que vale la pena reducir la velocidad y tomarse el tiempo para disfrutarlo de verdad.
2. Te prepara para el sexo con penetración.
Para las parejas heterosexuales, "pene en vagina" no debería ser siempre el objetivo final del sexo, pero una buena cantidad de juegos preliminares puede hacerlo aún más placentero. Dedicar más tiempo a los preliminares significa que estarás preparado para la penetración.
Además de ayudar a lubricar y mantener la erección, los juegos preliminares ayudan a relajar los músculos para el sexo vaginal o anal, haciéndolo más placentero para todos.
3. Aumenta la sensación de intimidad
Los preliminares suelen ser la parte más íntima del sexo. Dedicar tiempo a acariciar y explorar el cuerpo de tu pareja hace que se sienta deseada y atractiva. A todo el mundo le gusta sentirse bien consigo mismo, así que esto puede aumentar la excitación de todos.
Tanto si estás con una pareja estable, con un amigo con derecho a roce o con un ligue ocasional, la sensación de intimidad que produce una buena y larga sesión de preliminares puede hacer maravillas en el sexo.
4. Reduce el estrés
La oxitocina (también conocida como la "hormona del abrazo") se libera durante la actividad sexual. Los preliminares tienen un efecto calmante, ya que la oxitocina reduce los niveles de cortisol, la hormona que produce el estrés.
Al participar en un montón de juegos previos, te estás asegurando de que tú y tu pareja no sólo están físicamente en el estado de ánimo, sino también mentalmente allí.
Cuando dedicas más tiempo a los preliminares, estás permitiendo que tú y tu pareja dejéis atrás las ansiedades y preocupaciones del día para centraros en el placer.
5. Aumenta la expectación
Una larga sesión de juegos preliminares, sobre todo si hay muchas bromas y tanteos, es una forma estupenda de aumentar la tensión sexual.
Si te tomas más tiempo del habitual para besar a tu pareja y quitarle la ropa, deseará que la toques y será aún más placentero cuando por fin lo consiga.
6. Es una oportunidad para experimentar
Todos sabemos lo fácil que es caer en una rutina de juegos preliminares formulista, como los que vemos en el porno.
Sin embargo, los preliminares son el momento ideal para experimentar con un juguete nuevo, practicar el lenguaje obsceno o probar un juego sexual.
Al dedicar más tiempo a los preliminares, te estás dando más oportunidades de explorar nuevas experiencias y sensaciones, en lugar de centrarte únicamente en los genitales.
Utiliza este tiempo para explorar lo que realmente excita a tu pareja y para divertirte un poco: ¡devuelve el "juego" a los preliminares!
Creo que todos deberíamos convertir los juegos preliminares en más juegos (lo siento, no he podido resistirme al juego de palabras). Además de hacer que el sexo sea más placentero para todos, puede tener beneficios emocionales, como reducir el estrés y aumentar la intimidad en la relación.
No haga caso a quien le diga que puede haber demasiado de algo bueno: los juegos preliminares son siempre la excepción.
