Cuando hablamos de sexo, lo primero que le viene a la mente a la mayoría de la gente es "pene en vagina" o alguna variante de esto.
Sin embargo, aunque eso no es incorrecto, hay muchas otras formas de dar y recibir placer que no son a través de la penetración o de ser penetrado, que son tan legítimas (y placenteras) como cualquier otro tipo de sexo.
Mucha gente opta a menudo por tener diferentes tipos de sexo en lugar del estándar ‘pene en vagina’.
Así que aquí están mis mejores opciones para tipos de sexo sin penetración – o, "Outercourse". Algunas de estas sugerencias pueden acabar convirtiéndose en tus favoritas y en un elemento básico de tu dormitorio, o puede que nunca vuelvas a probarlas, pero al menos lo has intentado.
¿Por qué no querrías penetración?
Hay un montón de razones por las que una persona puede optar por no tener relaciones sexuales con penetración, que van desde razones médicas a simplemente no disfrutar de la sensación.
Por ejemplo, una amiga mía padece vaginismo, una enfermedad que hace que los músculos vaginales sufran espasmos y se cierren involuntariamente. Por lo tanto, el sexo con penetración es demasiado doloroso para ella, así que prefiere practicar sexo oral o masturbarse mutuamente con su pareja.
Otra persona no se identifica con el género que se le asignó al nacer y considera que penetrar a alguien o ser penetrado le provoca angustia y disforia de género.
Por último, a un amigo que va en silla de ruedas le preguntan a menudo: "¿Cómo practicas el sexo?", o en varias ocasiones, la mucho menos delicada: "¿Todavía te funciona el pene?". Para este tipo de preguntas, siempre tiene una respuesta: Si la única forma que se te ocurre de complacer a una mujer es sólo con el pene, te estás perdiendo mucho más.
Boom.
Esa frase ha conseguido que le compren muchas copas.
Entonces, ¿cuáles son tus opciones de relaciones sexuales sin penetración? Recuerda siempre que la comunicación es la clave, establece tus límites con tu(s) pareja(s) y sólo haz tanto o tan poco como todas las partes se sientan cómodas.
1. Jugar con los pezones y las tetas
¿Sabías que algunas personas pueden alcanzar el orgasmo sólo con el juego de pezones? Le compré a mi novia un juego de bomba para pezones para ver si le gustaba y, desde luego, ¡la sensación aumentada fue bien recibida!
Si pensar en bombas y succionadores de pezones te hace decir "¡Ay!" en lugar de "¡Oh!", no te preocupes, hay algo ahí fuera para ti. En el lado más suave, los besos, las lamidas y las cosquillas pueden contribuir a la diversión.
Las mamadas (en las que una persona mete su pene entre tu escote y tú juntas los pechos para proporcionar fricción y tensión) son otra opción si a ti o a tu pareja os gusta el juego con los pechos.
La efectividad sí depende del tamaño de tu busto y de la posición en la que estés, pero si, como yo, eres más pequeña en la zona del pecho, asegúrate de usar la gravedad a tu favor (básicamente, no te acuestes boca arriba).
También es importante recordar usar mucho lubricante para mayor placer.
2. 2. ¡Saca los juguetes!
Usar juguetes sexuales con tu pareja puede parecer incómodo al principio, sobre todo si no estás segura de qué sensaciones le pueden gustar, pero comunicándole lo que le hace sentir bien puede llevaros a un nuevo nivel de intimidad.
Yo recomendaría empezar con algo sencillo antes de ir directamente a la velocidad máxima de tu varita mágica.
Los estimuladores de dedos, las caricias o incluso un par de guantes proporcionan sensaciones diferentes y te ayudan a encontrar lo que más te gusta.
Introducir juguetes durante la masturbación mutua puede aumentar la experiencia, sobre todo si se trata de un vibrador controlado por control remoto o por una app. Cambiar y experimentar con el placer que recibe tu pareja puede ayudaros a sentiros más cercanos e implicados en el acto.
3. Sexo oral
Este es mi acto favorito de las relaciones sexuales sin penetración. Tu pareja se centra en ti y en tu placer, en un área en la que muchas personas se sienten incómodas cuando otros se ponen cara a cara (por así decirlo).
La gente puede ponerse bastante nerviosa si se relaja lo suficiente como para dejar que alguien se la chupe, así que para aliviar los nervios, dúchate antes, baja las luces y asegúrate de que estás en una posición cómoda para los dos. Al fin y al cabo, no querrás precipitarte.
Utilizar lubricantes aromatizados puede mejorar la experiencia, sobre todo si te pone nerviosa tu sabor.
Si no estás segura de tu técnica, como siempre, pregúntale a tu pareja cómo le gusta (pero recuerda que es de mala educación hablar con la boca llena, así que asegúrate de escuchar sus instrucciones).
Lizi es estudiante de Sociología en la Universidad de Northumbria y suele escribir en su blog como Some Angry Northern B*tch. Cuando no está repartiendo su afecto entre sus dos parejas, suele dedicárselo a su erizo mascota, Stormageddon.
