La infección genital por hongos se considera una de las llamadas infecciones endógenas del cuerpo humano.
Normalmente en la superficie de la piel y de las mucosas (boca, aparato digestivo, vagina) hay pequeñas cantidades de hongos que no causan enfermedades ni molestias. Lo más frecuente es que estos hongos sean Candida albicans, pero es posible que se trate de alguno de los otros miembros de la especie Candida, por ejemplo, C. Glabrata, C. Troipicalis y otros.
Bajo la influencia de diversos factores externos e internos, pueden causar enfermedades. La característica de la candidiasis vaginal es que nunca se desarrolla en ausencia de estrógenos en los tejidos. Por lo tanto, la infección casi nunca se observa en las niñas antes de la pubertad, así como en las mujeres en la edad posmenopáusica.
Sin embargo, las infecciones por levaduras son increíblemente frecuentes en mujeres en edad fértil (técnicamente, mujeres que pueden quedarse embarazadas y tener hijos). Algunos estudios estiman que tres de cada cuatro mujeres contraerán una infección por hongos a lo largo de su vida, y muchas mujeres contraen múltiples infecciones por hongos a lo largo de su vida.
Aunque se conocen varios factores de riesgo de las infecciones por hongos, probablemente no te sorprenderá saber que no se ha investigado mucho sobre los juguetes sexuales y las infecciones por hongos. Muchos juguetes sexuales sólo se utilizan en el exterior del cuerpo, por lo que no deberían influir en una infección por hongos. En el caso de los juguetes sexuales de uso interno, lo más probable es que cualquier relación con las infecciones por hongos sea indirecta. Aun así, merece la pena pensar en ello y hacer lo posible para evitar cualquier cosa que pueda favorecer una infección por hongos. Estas son algunas de las posibles formas en las que el uso de juguetes sexuales podría favorecer una infección por hongos.
Se cree que algunos lubricantes personales aumentan las probabilidades de contraer una infección por hongos, sobre todo en el caso de las personas propensas a padecerlas. Dado que es importante utilizar lubricante con los juguetes sexuales, es posible que una infección por hongos tras el uso de un juguete sexual se deba al lubricante y no al juguete.
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Irritación por fricción
La mayoría de los juguetes sexuales que se utilizan para la penetración crean una fricción significativa, especialmente con un uso vigoroso. La fricción puede irritar la piel y provocar irritación. La fricción puede romper capas de la piel o de la mucosa vaginal y esto puede comprometer la barrera protectora que normalmente proporciona el tejido sano.
Reacción alérgica
Puedes tener una reacción alérgica al material del juguete sexual o al lubricante que estás utilizando con el juguete. La reacción alérgica también puede causar irritación y provocar un aumento del riesgo de infección por hongos, como en el caso anterior.
Infecciones de la vejiga
Ya sea por la fricción y la limpieza inadecuada del juguete sexual o por una reacción al material del juguete sexual, el uso de juguetes sexuales puede causar infecciones de la vejiga y/o del tracto urinario. Dado que las infecciones de la vejiga se tratan con antibióticos, y los antibióticos a su vez promueven el crecimiento de hongos vaginales, esta puede ser otra forma indirecta en la que el uso de juguetes sexuales podría aumentar las probabilidades de una infección por hongos.
Antibiotics
Por último, si contraes una infección de vejiga y te recetan antibióticos, éstos aumentan el riesgo de una infección por hongos.
Reducir el riesgo
Aquí tienes algunas cosas que puedes hacer para reducir el riesgo de contraer una infección por hongos a través de los juguetes sexuales:
- Evite los lubricantes con glicerina.
- Para reducir la irritación producida por la fricción, utiliza muchos lubricantes sin glicerina y vuelve a aplicar lubricante si utilizas los juguetes durante un periodo de tiempo prolongado.
- Cuando elijas un juguete sexual, compra materiales de mayor calidad que sean más fáciles de mantener limpios, como plástico duro, metal o silicona.
- Lava siempre tus juguetes, déjalos secar al aire y guárdalos en un lugar limpio.
Limpiar los juguetes sexuales antes y después de cada uso
Una correcta y buena higiene íntima incluye algunos aspectos específicos como la limpieza regular de los juguetes sexuales antes y después de cada uso. Sí, los juguetes sexuales también necesitan una limpieza a tiempo y a fondo para que no contraigamos hongos u otras infecciones cuando decidamos divertirnos con ellos.
Los estudios demuestran que sólo el 35% de las mujeres que utilizan este tipo de dispositivos los limpian después de cada uso.
En el mercado existen toallitas especiales y otros productos de higiene fabricados especialmente para limpiar los juguetes sexuales.
Cuando limpias tu juguete antes y después de cada uso, reduces el riesgo de infecciones. A menudo se descuida este cuidado específico, lo que puede traerte problemas e interrumpir tu entretenimiento sexual.
Por supuesto, la mayoría de los juguetes sexuales modernos se pueden lavar con agua y jabón. Pero ten cuidado en la zona alrededor de las pilas.
Si notas una grieta en alguna parte, el agua que entrará durante el lavado puede dañar tu juguete. Los juguetes que tienen una superficie porosa y gelatinosa son más difíciles de limpiar.
Los otros, que están hechos de látex médico y material liso similar al cristal, son fáciles de limpiar. Si sospechas que no los has limpiado bien, es mejor que te pongas un preservativo para mayor seguridad.
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