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Éste es el asunto. He estado barajando la idea de reseñar juguetes sexuales en este blog. Sé que nunca he hablado mucho de ello, pero adoro los juguetes sexuales y los juguetes eróticos. Y creo que es una pena que no lo haya hecho. Porque los juguetes sexuales son increíbles, divertidos y una forma estupenda de aprender qué le gusta y qué no le gusta a tu cuerpo. También creo que hay un cierto tabú en torno a los auxiliares del placer, y que son un tema del que simplemente no hablamos. Y a partir de ahora me gustaría romper ese tabú. No soy una experta en sexo, pero soy una mujer normal con una vagina normal que está dispuesta a contarte los entresijos de los juguetes que he probado. Así que vamos a ello, ¿vale?
El primer juguete que he elegido para reseñar es el Lelo Soraya. La razón por la que lo he elegido es porque probablemente sea el favorito de mi colección. El Soraya es un vibrador de lujo estilo conejo. Está hecho de suave silicona y está disponible en tres colores: rosa, morado y negro. Yo tengo la versión negra en mi baúl de juguetes.
Lo primero que llama la atención del Soraya es su forma. No se parece a la mayoría de los juguetes eróticos del mercado. Es completamente lisa, sin ángulos ni rebordes. Es ligeramente curvado y se ensancha un poco en la parte superior, lo que lo convierte en un gran juguete si estás empezando a jugar con el punto G o si te gusta un poco de estimulación suave del punto G. La pequeña protuberancia de la parte superior estimula el clítoris. El Soraya tiene dos motores, uno en el eje y otro en la protuberancia del clítoris.
Me encanta el aspecto de este juguete. Me gusta que no se parezca en nada a un pene. Los juguetes realistas me dan un poco de miedo. También creo que la forma y el aspecto lo convierten en un juguete estupendo para dárselo a un hombre para jugar en pareja. Conozco a muchos hombres que se sienten raros usando un juguete con forma de pene con sus parejas, así que este juguete es ideal para evitar ese problema.
Una cosa que me irritaba del Soraya al principio es que no se ajustaba bien a mi cuerpo. El estimulador de clítoris estaba demasiado alto para llegar a mi clítoris. Esto era frustrante, porque mientras que la estimulación interna era increíble, la protuberancia externa zumbaba encima de mi montículo púbico sin hacer nada. Después de experimentar un poco, me di cuenta de que el brazo que sujeta el estimulador de clítoris es muy flexible y se puede doblar fácilmente para dirigir las vibraciones al punto perfecto.
El Soraya está hecho de silicona, lo que es estupendo por muchas razones. En primer lugar, su tacto es suave como la seda. En segundo lugar, no es porosa y es segura para el cuerpo. Y en tercer lugar, es muy fácil de limpiar. Soraya es resistente al agua, por lo que puedes enjuagarlo en el lavabo o rociarlo con una solución limpiadora de juguetes. El centro del juguete es de plástico duro con pintura dorada. No me gusta este aspecto del diseño. Hay un borde donde se unen la silicona y el plástico. Aunque no se nota durante el juego, es lo suficientemente profundo como para que el lubricante y los fluidos queden atrapados y sea difícil de limpiar. Me parece que tengo que pasar una uña o un palillo a lo largo del borde para limpiarlo completamente. Y este proceso de limpieza ha hecho que la pintura dorada se descascare en algunos lugares. Me decepcionó mucho este aspecto del diseño del juguete, porque esperaba más de un juguete de lujo.
¡Basta de hablar de su aspecto, hablemos de su rendimiento! El Soraya es un vibrador recargable. Hasta que compré este juguete, todos los vibradores que tenía funcionaban con pilas. El Lelo los supera a todos. Mantiene la carga realmente bien, y puedes jugar durante cuatro horas con una sola carga. No pierde potencia ni se apaga lentamente como los juguetes que funcionan con pilas, y puedes usarlo enchufado o sin cables.
En cuanto a potencia, este juguete es increíble. Tiene vibraciones fuertes y retumbantes que no producen zumbidos ni cosquillas. El ajuste más alto es suficiente para hacer que tu clítoris se dispare, así que si eres el tipo de chica a la que le gusta la estimulación intensa, o prefieres un toque más suave, este juguete te da muchas opciones. A pesar de su potencia, el Soraya es realmente silencioso. Cuando estoy debajo de una manta ni siquiera oigo su zumbido.
Los controles también están muy bien. La Soraya tiene tres botones. Pulsas el botón + para encenderla y el botón – para apagarla. Si pulsas el botón + o – durante el juego, aumenta o disminuye el nivel de vibración. El botón del medio recorre los diferentes patrones de vibración. Me encantan los diferentes patrones de este juguete. Puedes elegir algo sencillo, como pulsaciones rápidas o lentas, o utilizar mi configuración favorita, que te ofrece vibraciones ondulantes a lo largo del juguete.
Si hubiera algo que cambiaría de los controles de este juguete, sería tener un control separado para los estimuladores internos y externos. He tenido otros juguetes en el pasado en los que podías controlar cada motor de forma independiente, así que si prefieres una vibración interna más fuerte pero sólo un ligero cosquilleo en tu clítoris, entonces tienes control total sobre eso. Como ambos motores están controlados por los mismos botones en este juguete, no tienes el mismo nivel de control sobre tu experiencia. Puedes apagar un motor y hacer vibrar sólo el eje o la protuberancia mientras el otro está inactivo. Pero si los dos están encendidos, tienen que tener la misma potencia. Esto me pareció un poco molesto, pero no totalmente perjudicial.
Otra función que me encanta es el bloqueo de viaje. Si mantienes pulsados los botones + y – durante 3 segundos, el juguete se bloquea, por lo que puedes meterlo en el bolso sin preocuparte de que se active accidentalmente en la estación de tren (sí, me ha pasado alguna vez). Para desbloquear el juguete, basta con mantener pulsados los botones de nuevo. Es una función increíble y ojalá la tuvieran más juguetes.
Hablemos ahora del precio. Como vibrador de lujo, el Lelo Soraya es bastante caro. Normalmente cuesta 319 dólares en el sitio web de Lelo. Sin embargo, yo conseguí el mío en oferta por $212 en Adultshop (¡y psst! ¡Todavía está en oferta!). Ahora, no todos tenemos $ 212 para gastar en un vibrador. Pero creo sinceramente que merece la pena gastarse un poco más en éste. Funciona de maravilla, es práctico y funcional, es silencioso y, en general, está bien hecho. Si vas a tener un solo vibrador en tu colección, te recomiendo que ahorres y compres este porque es maravilloso. Aunque tengo muchos otros juguetes en mi colección, este es al que vuelvo una y otra vez.
En general creo que el Lelo Soraya es un juguete excelente y lo recomiendo encarecidamente. Es un vibrador de lujo que cumple su función a la perfección.
¿Tienes alguna pregunta sobre este juguete? ¿O sobre juguetes eróticos en general? ¡Dispara! (Pero de forma respetuosa y limpia).
