Debido a la gran cantidad de terminaciones nerviosas, tus pezones son una zona súper sensible de tu cuerpo, lo que los hace más sensibles al tacto.
Sin llegar a ser demasiado científico, se ha descubierto que el placer que sentimos al jugar con los pezones puede encender la misma parte de nuestro cerebro que cuando estimulamos nuestros genitales, por lo que incorporarlos en los juegos preliminares y en el sexo puede aumentar mucho la experiencia.
Ahora que estás interesado, pasemos al juego con los pezones. Pero antes, rompamos un mito.
¿A los hombres les gusta que jueguen con sus pezones?
Sí, las sensaciones que se experimentan al tocar los pezones son las mismas para hombres y mujeres. Pero al igual que a algunas mujeres el juego con los pezones puede resultarles irritante o doloroso en lugar de excitante y estremecedor, los hombres también pueden sentir lo mismo ante este tipo de estimulación, así que es mejor preguntar primero.
Mucha gente tampoco se da cuenta de que los pezones son una zona erógena para los hombres, pero ciertamente pueden serlo – así que ten en cuenta que las recomendaciones de este artículo se aplican a todos los que disfrutan del juego con los pezones.
¿Qué es el juego con los pezones?
El juego de pezones es el acto de estimular el pezón de alguna manera que el receptor experimente excitación y placer por ello. Puede realizarse solo o como parte de los juegos preliminares, así como durante las relaciones sexuales.
¿Puede alguien tener un orgasmo de pezón?
En teoría, sí – algunas personas son tan sensibles a la estimulación del pezón que pueden experimentar un orgasmo sólo de pezón, conocido como nipplegasmo.
No hay duda de que tanto el clítoris como el pene tienen cientos, si no miles, de terminaciones nerviosas más que los pezones, pero eso no significa que no se pueda tener un orgasmo sólo con el juego de pezones. Sólo significa que un orgasmo de pezón puede tardar un poco más en alcanzarse.
Muchas personas afirman que tienen que tener muchas ganas o estar muy excitadas para intentar tener un orgasmo de pezón, mientras que otras dicen que les resulta fácil. Y el hecho de que algunas personas puedan tener un orgasmo sólo con el juego de pezones no significa que todo el mundo pueda, así que tenlo en cuenta mientras exploras y experimentas e intenta centrarte en el placer por encima de cualquier otra cosa.
¿Cómo se siente un orgasmo de pezón?
Los orgasmos de pezón son diferentes para cada persona. Para algunas duran más que los orgasmos genitales y para otras son cortos y agudos.
Debido a su ubicación, muchas personas describen el orgasmo de pezón como una experiencia que abarca todo el cuerpo, en lugar de concentrarse exclusivamente en la zona genital. Algunos también dicen que la estimulación de los pezones intensifica los orgasmos genitales cuando se combinan ambos.
Si tus pezones son menos sensibles, alcanzar el clímax puede llevar más tiempo, lo que puede resultar en un orgasmo más satisfactorio. Para algunos, el hecho de que un orgasmo de pezón sea un poco más difícil de alcanzar es excitante en sí mismo.
En el caso de las personas que tienen la menstruación, los pechos y los pezones pueden estar más sensibles durante las diferentes fases del ciclo menstrual, lo que puede hacer que el juego con los pezones y los orgasmos de pezón sean una experiencia totalmente diferente.
Cómo estimular los pezones
Para empezar, intenta crear el mejor ambiente -tanto físico como mental- para un posible orgasmo de pezones. Esto puede significar atenuar las luces, encender velas, poner música o simplemente encontrar una postura cómoda, lo que te haga sentir más relajada y preparada para la excitación.
Ahora, manos a la obra. Hay cuatro formas principales de jugar con los pezones:
1. Manos y dedos
2. Boca y lengua
4. Succionadores de pezón
Estimular los pezones consiste en tocar y provocar las terminaciones nerviosas de la forma que te resulte más placentera, así que si es la primera vez que pruebas a jugar con los pezones y no estás segura de lo que funciona, prueba estos métodos para ver qué prefieres
Repasemos cada uno de ellos en detalle.
Cómo jugar con los pezones usando las manos
Tus manos tienen la capacidad de proporcionar desde una suave caricia hasta un apretado pellizco en un solo movimiento. Si eres nuevo en esto, lo mejor es que explores todo lo que puedes hacer con las manos durante el juego con los pezones antes de pasar a los juguetes para pezones. Aquí tienes algunas cosas que tú o tu pareja podéis probar, en orden de tacto de más suave a más fuerte:
Acariciar: Desliza las yemas de los dedos sobre la areola (la zona que rodea el pezón) y el pezón, centrándote en la punta del pezón hasta el vientre y de nuevo hacia arriba.
Masajea: Utiliza las yemas de los dedos y tal vez un poco de aceite o lubricante para frotar con movimientos circulares alrededor del pezón y la zona del pecho, incorporando ligeros apretones del pezón aquí y allá.
Flicking: Con el dedo índice, frota el extremo del pezón tan fuerte o tan suave como quieras.
Retorcer: Con el pulgar y el índice, gira suavemente el pezón hacia un lado y luego hacia el otro. Si descubres que te gusta esta sensación, prueba a girarlo un poco más fuerte y más rápido.
Pellizcar: Utiliza el pulgar y el índice y aprieta el pezón entre ellos; puede que te duela si no estás acostumbrada, así que empieza con cuidado.
Puedes seguir estos puntos para llegar al orgasmo o, si ves que te gustan más algunas de las sensaciones que otras, puedes mezclarlas para crear un juego de pezones a tu medida o probar juguetes para pezones, que recrean las mismas sensaciones.
Cómo chupar pezones
Chupar un pezón estimula el flujo sanguíneo hacia la punta del pezón, lo que lo hace aún más sensible, algo parecido a lo que le ocurre al pene justo antes de eyacular.
Lo más probable es que necesites un compañero para realizar este paso. Para chupar los pezones, tu pareja debe llevarse el pezón a la boca y empezar a chupar suavemente, aumentando la succión si es necesario. Para hacerlo más placentero, tu pareja puede mordisquear ligeramente el pezón, o puede utilizar la lengua para mover la punta y lamer alrededor del pezón con movimientos circulares.
De nuevo, prueba una mezcla de técnicas bucales hasta que encuentres la más adecuada para ti, comunicándote con tu pareja sobre la marcha.
Y recuerda, ¡esto también funciona con los hombres!
Cómo usar pinzas y succionadores para pezones
Mientras que un vibrador puede hacer el truco cuando se trata de juguetes sexuales para jugar con los pezones, a algunas personas no les gustan las vibraciones en una zona tan sensible. Aquí es donde entran en juego las pinzas y los succionadores de pezones. Estos dos ingeniosos juguetes atraen la sangre al pezón, haciéndolo muy sensible cuando se retiran.
